Mi relación con la fotografía ha ido cambiando con el paso de los años. Hoy siento que sin haberlo previsto, las piezas de mi puzzle encajan: estoy dónde quiero estar y haciendo lo que me apasiona.

Al final todo tiene que ver con la fotografía, incluso mis estudios en Psicología han encontrado un amplio espacio en este proyecto personal y profesional que es EEF. La expresión de las emociones y sentimientos, el acto mismo de la percepción visual, todo encaja dentro de este medio de comunicación directo, inmediato y universal que es la fotografía. Un arte que me permite explorar el mundo dentro y fuera de las fronteras de la piel.

Como temas siento un gran interés por los procesos de introspección, la construcción del género y la identidad, así como el espacio como escenario vital en el que se dan todos estos procesos y también, como elemento narrativo.